Mientras algunos ingresan, otros poguean.
Así fue la previa este viernes en Plaza de la Música mientras el público esperaba ansiadamente a Ysy A.
En su mayoría jóvenes, el público alentó desde principio a fin. Cantando y pogueando. Bajan las luces y una voz pregunta si ya están listos. Entre gritos, euforia, saltos y señas de manos el público recibe a Ysy A, quien en cuestión de segundos estalla en trap con su aparición y voz.
Alegría y agradecimiento fueron parte del recital. El joven trapero manifestó su afinidad con la ciudad cordobesa, la cual reconoció como una de las más visitadas durante su carrera musical. Hasta afirmó que debería haber nacido acá.
Canto y agite nacionalista no falto. Afecto y orgullo por su país, tampoco.
En un momento advirtió al público que lo único que quería que le tiren eran banderas de Argentina. Sea la hora que sea, trap de verdad. Fue una fiesta desde el primer momento. Repasó 3 álbumes cuya elección fue del público. El artista no solo recibió halagos si no que también interactuo con sus seguidores. Pregunto sectorizadamente cómo estaban, qué tanto agite podian dar, entre otras cosas. Un líder de escenarios, con música para escenario. La temperatura fue tema de la noche: “que calor mi amor”. Y era de esperar, pues un público tan fiel, en un show de clásicos hecho a mano, solo podían generar un sismo. Tamo loco cerro la noche, que sin dudas quedará para siempre en las memorias de quienes asistieron.
Promete mucho más tiempo en los escenarios. Y de ser así, esta generación lo acompañará.
Crónica realizada por Luciana Berritella, fotografías a cargo de Eugenia Barrera, para www.delaviejaescuela.com
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