Luego de un intenso 2017 plagado de giras y recitales en el otro lado del charco, Los Espíritus llegan al mito de las sierras para seguir con la envión de Agua Ardiente y colmar el principal.
Comenzando con el tema que lleva el nombre de su último material plagaron de buenas notas de blues al público aglutinado buscando un poco de calor en la tarde fría.
El resto del repertorio se completaría con temas ya clásicos por su melodía, como “Jugo” y “La Mirada” despertando muchas piernas dormidas.
Con sus vestimentas siempre tan particulares asemejan a una realidad extraída de alguna película de Tarantino en el que su música surf podría ser tranquilamente sustituida por estas guitarras psicodélicas.
“Jesús rima con Cruz” y un pasaje instrumental invita a un viaje interestelar que da paso a “la nariz mojada y la paranoia de Perro Viejo”.
Un grato momento vivido junto con los de La Paternal que llegan por primera vez al Cosquín Rock, espero que, para quedarse.
Crónica realizada por Nahuel Navarro para www.delaviejaescuela.com
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