En un presente a puro sentimiento, la banda que lidera el Piti Fernandez festejó su segunda década en una Plaza de la Música que explotó, como piñata en fiesta, como la 20.
Cerca de las 22 hs, cuando se cerraba el telón del viernes pasado, Las Pastillas del Abuelo festejó su cumpleaños en La Plaza de la Música. Lo que comenzó en el Barrio de Balvanera, allá por el 2002, hoy ya es historia: 20 años de tocar en bares como La Colorada, a girar por la Argentina, latinoamérica y el mundo. Lo de Las Pastillas nunca fue casualidad. La banda quedó conformada en 2004 y, desde ese entonces, nunca dejó de tocar. En esta oportunidad, la fiestita convocó a miles de personas que se reunieron en la ex Vieja Usina para celebrar.Desde “Por colectora” hasta “2020” recorrieron casi toda la ruta, parando por las diferentes estaciones que tiene cada disco. Y en ese recorrido, el público disfrutó, cantó, bailó, pogueó. Todo junto. Digno de una fiesta sin precedentes. El repertorio estuvo cargado de emociones, pero sobre todo desafíos. Entre la lista larga de temas, destacaron aquellos que marcaron y dejaron huella en los pastilleros: Fuerza, Locura y Libertad!, ¿Dónde esconder tantas manos?, Amar y envejecer, Tantas escaleras, Skalipso, Ojos de dragón y la dedicatoria al 10, con ¿Qué es Dios?, entre otras muchas más. Las Pastillas del Abuelo logran una mancomunión con el público, lo cual sucede cada vez que se suben al escenario. Y ese vínculo es fuerte, tan fuerte como sostenible en el tiempo, sostenible como las aquellas estaciones que, sin duda, siempre son primavera
Crónica y fotos realizadas por Juan Pablo Rodano y Eugenia Barrera para delaviejaescuela.com
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