Fabiana Cantilo en Córdoba

Fabiana Cantilo dejo su huella en Córdoba, el pasado viernes 10 de noviembre desplegando su magia en “Quality espacio”

Fabi en acción. / Fotografía: Eugenia Barrera.

A las 21:15, con un explosivo cover de Demoliendo hoteles, comenzó la fiesta y todos cantamos efusivamente este gran clásico de Charly García. “Buenas noches, Córdoba” nos daba la bienvenida Fabi. La segunda canción de la grilla fue La tregua, en el medio de esta Cantilo tuvo que pedir que le diéramos un segundo para solucionar un inconveniente “A ver toca Darío, ahora se fue. Estaba la guitarra de Darío en mi oreja, les cuento las cosas que pasan”, la respuesta de la audiencia fue aplaudirla y alentarla a que siguiera.

Cantilo no solo desplegó su magia a través de su excelente voz, si no que también tocando sus instrumentos. Con su guitarra acústica en mano, nos deleitó con Meteoritos.

Luego de descoserla cantando y bailando el cover de la Bestia Pop de los Redondos, y demostrando que no le importa nada, volvió a parar todo. Acto seguido le pidió a su estilista que se acerque con unas tijeras y que le corte las mangas de su vestuario, porque hacía mucho calor. Así es ella, tan auténtica y sabiendo que su público le va a hacer el aguante. “Ahora sí, sigamos con esto” dándole pie a uno de los grandes hits de Fabi Llego tarde.

“Me traen la banquetita, porque me agarró el ciático, chicos. Es gracioso pero es verdad, debo confesar. Bueno vamos a cantar una canción que no la conocen tanto, pero que habla del amor incondicional, que tanto necesitamos estos últimos tiempos. El amor de verdad. El amor por la música puede ser, por alguna mascota, porque el amor de pareja vemos (todos se rien), chan. Igual no quiere decir que no exista.”

nos decía dicharachera mientras agarraba nuevamente su guitarra para cantar Superamor. El tema que le siguió en el repertorio fue Tiro de Gracia.

“Esta canción se la hice a mi querido Fito, es del último disco. Está afinada en 4:32 que se supone que calma, que trae amor. No está teniendo mucho amor este escenario (se ríe), tenemos algunos problemas de sonido, pero no importa espero que les guste igual”, y entonó las estrofas de Dinosaurito.

Desplegó su talento con la guitarra eléctrica, mientras recorría el escenario cantando La Vela, y jugando con sus músicos de tantos años. Luego Fabi, que ya merecía un descanso, nos explicó que era lo que iba a seguir: “Ahora llego el momento de presentar a una gran artista, una amiga mía, mi profe de canto, que baila conmigo. La señora Marisa Mere nos va a deleitar con una de sus canciones. Ha hecho unas canciones divinas, es una gran cantautora. Ya vengo, siganla por marisameremusica” tan generosa con su colega, Cantilo se retiraba del escenario y nos dejaba con Mere quien nos enamoró con su tema No insistas.

Con Nada es para siempre la sala canta el estribillo, mientras ella se sienta debajo del bajista y lo señala mientras hace su solo. Fabi en un momento se pierde y el tecladista hace de director y dice “todo vuelve a mí” y siguen. Al finalizar la canción, agradecida con su equipo Fabi dice “El señor Andrés Dulcet salvando las papas como loco” señalando al bajista. “Está todo espectacular Fabi dale, vamos Fabi” fue la respuesta desde las gradas.

“Esta canción habla un poco de lo que yo pienso de la vida, ponele. En este momento ya es la vida, antes era la pandemia y ahora es la vida. La batalla de la vida, amigos.”

fue la presentación del tema La batalla Marisa la rompe con su voz en un solo de armonías increíble.

Una vez más, demostrando el talento que tiene en todos los instrumentos y que en su show se puede permitir hacerlo, Cantilo se sienta en la batería para cantar Algo mejor de su disco homónimo. Tal fue su gran desempeño que del público se escuchó un “Genia Fabi”. Luego volvió al frente y agarró la acústica para Amor equivocado.

Acto seguido, nos paramos todos para cantar y bailar con Ya fue y Fue amor, canción que Fito Páez le dedicó a Fabi y que ya es un himno para todos los argentinos.

Llevábamos hora y media de show y llegó el momento de otro hit Mary Poppins y el deshollinador. El Quality explotó, se sentía en los pies el retumbe de la gente saltando. Anticipando el cierre de la velada, llegó el momento de la presentación de la banda: “Marisa Mere, en coros; Darío Casciaro, en guitarra; Andrés Dulcet, en bajo; Cay Gutierrez, en teclados; y Silvio Ottolini, en batería” quienes fueron fuertemente ovacionados con un “ole, ole, ole, Fabi, Fabi, Fabi ole, ole, ole,!”

El momento de la reivindicación de la lucha femenina, llegó de la mano de una impresionante versión de Canción sin miedo de Vivir Quintana. Cantilo y Mere agarradas en el frente del escenario y cantando con todo el power femenino. Mientras en las pantallas aparecián imágenes con fotos de mujeres con carteles #niunamenos, vivas nos queremos.

Y así, con una noche llena de emociones la reina del rock nacional se despedía de los escenarios cordobeses con el tan esperado hit de la artista, Mi Enfermedad.

Una vela inigualable, donde Fabiana Cantilo demostró que es una luchadora de la vida, y que pese a las vicisitudes que pueden llegar a aparecer en un show, ella y su gran equipo tienen la fortaleza y la maestría para sobrellevarlas. Dando todo de sí para que su audiencia se vaya a casa con el corazón lleno y con ganas de volver a verla muy pronto.

Crónica realizada por Paola Toschi, fotografías a cargo de Eugenia Barrera para www.delaviejaescuela.com